miércoles, 18 de noviembre de 2009

JOHN SCOFIELD & THE PIETY STREET BAND - (29 Cartagena Jazz Festival)

JOHN SCOFIELD & THE PIETY STREET BAND
29 Cartagena Jazz Festival

Fecha: 14 de noviembre de 2009.
Lugar: Nuevo Teatro Circo (Cartagena, Murcia).
JOHN SCOFIELD & THE PIETY STREET BAND
John Scofield: guitarra eléctrica, voz, percusión.
Jon Cleary: piano, órgano, voz, guitarra, percusión.
George Porter Jr: bajo eléctrico, voz, percusión.
Terence Higgins: batería, percusión.





Un concierto cargado de nuevas emociones y sorpresas el que nos ofreció el guitarrista de jazz John Scofield en la ciudad de Cartagena. En esta ocasión vino acompañado por The Piety Street Band y con un regalo en el bolsillo, su nuevo disco Piety Street grabado en el con el sello discográfico Emarcy, un trabajo que recoge estilos que van desde el blues hasta el gospel, con algunas reminiscencias incluso de reggae y de jazz-funk, algo a lo que no nos tiene acostumbrados si tenemos en cuenta su larga carrera y discografía como músico de jazz. Esta conjunción de estilos diferentes en un mismo proyecto demuestra lo versátil que puede ser el veterano guitarrista a la hora de mostrar sus cualidades, capaz de adaptarse a nuevas funciones, pero manteniéndose fiel a sí mismo y a su forma de entender la música.


Tuve la oportunidad de escuchar este mismo proyecto en directo unos meses antes de la grabación, y entonces ya me pareció un trabajo distinto y curioso, pero sobre todo honesto. Los músicos que completaban el resto de la banda no anduvieron escasos de recursos, conocían bien los intrincados caminos por donde Scofield suele adentrarse en sus solos y nadaron como pez en el agua en los diferentes estilos. El pianista Jon Cleary es la voz principal en todos los temas; alternó este papel con el piano y un órgano Hammond que recordó el sonido característico e insustituible de este instrumento en el estilo blues. Con el soporte armónico de Cleary y una contundente e impecable sección rítmica en manos del bajista George Porter Jr y el baterista Terence Higgins, la maquinaria se puso en marcha, casi al rojo vivo. Scofield no paró ni un segundo; arreglos, voicings, líneas interválicas, efectos de pedal, voces y un sinfín de recursos y capacidades musicales dignas de mencionar en uno de los más sobresalientes guitarristas que nos ha dado el jazz contemporáneo.


Nueve fueron las piezas de su último disco incluidas en el repertorio, que comenzó con el tema que encabeza el proyecto “That’s Enough", un blues de 32 compases, preámbulo de lo que sería a posteriori el resto del concierto. Continuaron con otro blues, “Never Turn Back”, con coros incluidos de Scofield, que desarrollaron con un sistemático ritmo funky marcado por la batería de Higgins y el bajo eléctrico de Porter, conciso y muy consistente en su ejecución, lo suficiente para mantener con sus compañeros el continuo groove tan necesario en cada tema. La fusión de estilos country y reggae en el tema “I’ll Fly Hawai” daba ese toque divertido y sencillo de la canción rural. “The Old Ship Of Zion” relajó por momentos el ambiente con un tempo lento y amplios fraseos de la guitarra de Scofield. La voz de Porter acompañó a la del pianista en “Something’s Got A Hold On Me”, en una mezcla de blues armónico y letra cantada al estilo gospel de la vieja Nueva Orleáns, ciudad siempre presente en el origen de la música de jazz. Sonaron también canciones como “Walk With Me” y la conmovedora balada “The Angel Of Death”, que puso la piel de gallina a más de uno de los presentes. Tras los aplausos insistentes del público la banda se despidió con un bis, “It’s A Big Army”, en el que Jon Cleary tuvo un mano a mano a guitarras con Scofield en un dialogo musical exquisito y prolongado de preguntas y respuestas, de gran energía, hasta llegar al unísono.


En resumen un concierto vigoroso y muy placentero para un público que, en pie, supo agradecer el trabajo realizado de toda la banda y en especial de este infatigable guitarrista que es John Scofield. ¡Larga vida al maestro de maestros!


Texto: © 2009 José Antonio García López

Fotografías: © 2009 Rafa Márquez 

lunes, 16 de noviembre de 2009

CASSANDRA WILSON - (29 Cartagena Jazz Festival)

CASSANDRA WILSON

29 Cartagena Jazz Festival

Fecha: 14 de noviembre de 2009.
Lugar: Nuevo Teatro Circo (Cartagena, Murcia).
CASSANDRA WILSON
Cassandra Wilson: voz.
Jonathan Batiste: piano.
Marvin Sewell: guitarra eléctrica.
Reginald Veal: contrabajo.
Herlin Reily: batería.
Lekan Babalola: percusión.




El origen musical de algunos artistas puede desvelar la base esencial de su música, y en el caso de la cantante estadounidense de jazz Cassandra Wilson (Jackson, 1955), el encuentro con la esencia de este género musical se ha convertido en un estilo propio y muy personal. La ya larga carrera de la cantante, en la cual ha experimentado con una gran variedad de estilos, desde el blues hasta el hip hop, toma desde hace unos años, a partir de su disco Blue Light 'Til Dawn (1993) grabado con el sello discográfico Blue Note, un giro progresivo hacia un estilo individual, de fusion, apoyado en las raíces del jazz, en estilos como el folk, el country, o el blues. La improvisación con la voz y la descomposición de las formas musicales se han hecho elementos fundamentales y forman parte de casi todas las composiciones creadas por la cantante, así como de las versiones que realiza sobre temas de otros músicos.



Acompañada por una magnifica banda de músicos, muy atentos al desarrollo que imprime la cantante en sus temas, y después de una larga introducción, Wilson abrió el concierto con el standard clásico de Duke Ellington “Caravan”, basado en un ritmo afro de 4/4, en el que aportó nuevas y elegantes texturas, siempre bajo el prisma subjetivo que le define como una cantante diferente. Lejos de abarcar toda la atención individual, como líder que es, sabe compartir toda la carga musical con los demás componentes de su grupo, invitándoles a participar en los momentos de más intensidad, arropándose en los diversos sonidos y colores que salen de sus instrumentos, compartiendo su estado emocional y la actitud de darlo todo en el directo. El pianista Jonathan Batiste fue uno de los más destacados por su ejecución limpia, al estilo clásico de los grandes pianistas como Oscar Peterson, algo que cuadraba perfectamente dentro de esa fusión tan singular creada por la banda. Batiste se expresó con fuerza en los solos, creando momentos de gran intensidad frente a un Marvin Sewell casi desapercibido, de no ser por los etéreos arreglos con los que decoró gran parte de los temas, por ese sonido característico que saca de su pedalera de efectos y por el uso de la técnica slide o bottleneck en su guitarra. La sección rítmica formada por Veal, Reily y Babalola trabajó como un todo, unidos en mantener un vivo y constante groove necesario en cada tema. Baterista y percusionista tuvieron también la oportunidad de mostrar sus capacidades musicales en un diálogo mano a mano que protagonizaron casi al final de la velada.




Con un último disco bajo el brazo, Loverly (grabado en 2008 con el mismo sello Blue Note), la cantante incluyó en el repertorio buena parte de los temas que aparecen en este álbum. Así sonaron piezas como “Sleepin’ Bee” a swing medio, o el mágico “St. James Infirmary". El clímax llegó con "Black Orpheus", de Luis Bonfá, en el que la veterana vocalista manifestó su faceta más cálida y un dominio total sobre los ambientes tan peculiares que sabe crear. Para finalizar tocaron “‘Til There Was You”, tema que versionaron en su día los siempre perdurables The Beatles y otros.


El público quería más, un bis, parecía que los 70 minutos de concierto eran insuficientes, pero esta vez no pudo ser, quizá porque ese día hubo doble sesión con otro de los grandes del jazz.

Texto: © 2009 José Antonio García López 
Fotografías: © 2009 Rafa Márquez

sábado, 14 de noviembre de 2009

BRAD MEHLDAU TRIO - (29 Cartagena Jazz Festival)

BRAD MEHLDAU TRIO

29 Cartagena Jazz Festival

Fecha: 12 de noviembre de 2009.
Lugar: Nuevo Teatro Circo (Cartagena, Murcia).
BRAD MEHLDAU TRIO
Brad Mehldau: piano.
Larry Grenadier: contrabajo.
Jeff Ballard: batería.

El concierto de Brad Mehldau en Cartagena se anunciaba como uno de los más interesantes de la programación del festival, y así fue. Excepto por la anécdota que protagonizó el propio Mehldau con un fotógrafo que se saltó la regla impuesta de no hacer fotos durante el concierto, una regla que supuestamente conocían todos los reporteros que fueron a cubrir el evento. El pianista tuvo que parar la introducción del cuarto tema y levantarse del piano e ir hacia el sujeto en cuestión y explicárselo, mandándole a paseo con pocas y malas palabras. La verdad es que, aunque un poco desorbitada, entiendo la reacción del pianista. ¿Por qué aguantar el sonido del click de la cámara fotográfica sonando más que las notas del piano o incluso que el sonido del platillo de la batería?. Creo que fue engorroso e inoportuno el estar ahí, a tres o cuatro metros de los músicos, tirando fotos como un descosido, más teniendo en cuenta el tipo de música que el trío desarrolla, en acústico, con volúmenes bajos, casi sin amplificar y a veces imperceptibles. La música de Mehldau necesita del silencio del público y es esto quizá lo que menos respetan algunos. Por favor, en un concierto así, se debería prohibir hasta las bolsas de patatas, como se prohíbe otras cosas que son necesarias para el buen desarrollo del espectáculo. Con las aprobaciones y desaprobaciones de parte del público por lo sucedido, el murmullo que se creó fue a menos y pudimos seguir disfrutando de la velada.

Un concierto musicalmente impecable en cuanto a realización y sonido es lo que se espera cuando tienes delante, en el escenario, a tres grandes músicos de jazz. Desde el inicio del primer tema ya se adivinó la sobriedad y la seriedad con la que afrontaron la actuación; son unos profesionales en su trabajo. El grupo puede parecer un tanto cerrado y hermético por el hecho de componerse de solo tres músicos, pero esta idea se disipa cuando les escuchas interactuando entre ellos. Todos tienen su espacio musical y puntual en el desarrollo que pueda tener cada tema, como requiere el pianista, pero en ese aporte personal de cada uno también encontramos la forma singular e independiente de tocar de sus dos compañeros de grupo. Larry Grenadier es uno de los contrabajistas de jazz más destacados en la actualidad. Su aportación en el trío de Mehldau es fundamental, es él quien lleva la mayor parte de la carga rítmica y arropa con gran intuición todas las melodías e improvisaciones del líder. Por otro lado la interacción de Jeff Ballard con el contrabajista consolidó una base rítmica muy segura, sobre la cual navegaban los pasajes y fraseos de Mehldau. Ballard es un maestro en aguantar procesos musicales con movimientos contenidos y al contrario, como pudo demostrar con el único solo de batería que realizó en el concierto.

Muchas de las piezas elegidas para el repertorio pertenecen a su último disco llamado Brad Mehldau Trio Live, grabado en marzo de 2008 y editado por el sello discográfico Nonesuch Records. Así sonaron temas como “Wonderwall”, “O que será” de Chico Buarque o “More Than You Know”, con estilos diversos pasando desde el post-bop hasta el hard-bop y recogiendo influencias de otros estilos.

Un magnífico concierto, a pesar de lo ocurrido en el ecuador de los apenas 70 minutos que duró. Al final hubo muchos aplausos y peticiones de un bis que nunca llegó, es fácil imaginar por qué. No sé si el resto de los asistentes merecíamos ese trato casi despectivo, creo que no. No creo que una mayoría tenga que pagar los platos rotos de esa otra minoría que no sabe estar en un concierto de tanta categoría y calidad musical.

Texto: © 2009 José Antonio García López

domingo, 8 de noviembre de 2009

HIROMI QUARTET - (29 Cartagena Jazz Festival)

HIROMI QUARTET

29 Cartagena Jazz Festival

Fecha: 7 de noviembre de 2009.
Lugar: Nuevo Teatro Circo (Cartagena, Murcia).
Componentes:
Hiromi Uehara: teclados y piano.
John Shannon: guitarra eléctrica
Tony Grey: bajo eléctrico.
Mauricio Zottarelli: batería.




Aforo completo en el concierto que ofreció el cuarteto de la pianista japonesa Hiromi Uehara, en Cartagena.



Las influencias en la pianista son muchas, desde la música clásica hasta el jazz o el rock de los 70, así que su música no esta determinada hacia un estilo concreto, como bien ha expresado ella misma en alguna ocasión, y a falta de etiquetas no voy a ser yo quien la defina en un tipo de música u otro.

En esta ocasión no estuvo acompañada por su banda Sonicbloom, sino por el trío formado por el guitarrista John Shannon, el bajista Tony Grey y el baterista Mauricio Zottarelli. John Shannon demostró con creces sus características musicales. Mantuvo el nivel exigido y contribuyó en buena manera con nuevos sonidos en los arreglos, voicings y armonías. Por otro lado la interacción del bajista Tony Grey con Zottarelli aseguró una base rítmica de gran fuerza y dinamismo, elementos que se suelen dar en la mayoría de los conciertos de Hiromi. Mauricio Zottarelli demostró precisión, destreza y buen hacer. Prueba de ello fueron los diálogos rítmicos que mantuvo con la pianista, logrando momentos de gran intensidad.


El concierto se desarrolló con gran parte de los temas contenidos en su último disco como líder, llamado Beyond Standard y grabado en el 2008 con el sello discográfico Telarc. Sonaron temas como “My Favorite Things” de Richard Rodgers, donde la variación rítmica del 7/4 en la parte A del tema daba un empuje y dinámica contundente al desarrollo vertiginoso que con frecuencia imprime Hiromi Uehara en sus temas. Cabe destacar la gran labor del bajista Tony Grey, impecable y sólido en la ejecución, el más cómplice y atento a las iniciativas de la líder durante el concierto. Otro standard, el conocido “Caravan” de Duke Ellington, sonó, pero esta vez con un desarrollo más abstracto en la interpretación y sobre todo en los solos de improvisación. El uso del sintetizador, en los arreglos, rememoró el sonido característico de estilos como el jazz rock de épocas anteriores.



Hiromi Uehara volvió a levantar de sus asientos a un público contagiado de su energía y sobre todo de su actitud hacia la música. El último tema a modo de bis fue “The Tom And Jerry Show”, un rhythm changes que realizó sola al piano, divertido y arrollador, como la personalidad de la intérprete.

Texto: © 2009 José Antonio García López
Fotografías: © 2009 Rafa Márquez